Alas de Mujer

En la foto Mercè Matí, ganadora de la Vuelta al Mundo, «Soy una persona luchadora y, cuanto más difícil, más gratificante es el triunfo».

Mercè Martí Inglada: la primera española que no sólo se atrevió a competir en la Vuelta al Mundo de Velocidad en 1994 sino que, además, fue la primera que la ganó. Esta catalana, que se define como «aventurera, deportista y empresaria», se marchó a Estados Unidos para estudiar inglés, pero sus prioridades cambiaron y dejó el atletismo (deporte que le fascinaba) por las aeronaves. «Cada vez que vuelo, me siento libre. Es como si iniciara una gran aventura, incluso, tengo la sensación de que no tengo límites» dice Mercè.

Pero Mercè no es la única con Alas de Mujer: muchas fueron las que aportaron su granito de arena para que las mujeres tuvieran su hueco en la aviación.
Uno de los primeros, es el caso de María Bernaldo de Quirós Bustillo, quien logró el primer título de aviadora por la ENA (Escuela Nacional Aeronáutica). Fue el 24 de noviembre de 1928, 17 años más tarde que el primer hombre.

En la foto, María Bernaldo. Para esta madrileña, «lo de volar, que tanto impresiona a la gente, es muy fácil».

Con el paso de los años, las mujeres han ido aumentando su presencia en la aviación y ascendiendo de categoría, aunque de forma paulatina. Así, en 1969, Betina Kadner Shilling venció la resistencia del Ministerio del Aire y consiguió la modificación del reglamento que impedía pilotar aviones comerciales a las mujeres. De esta forma, pasó a la historia como la primera mujer a los mandos de un avión con pasajeros en este país.

En la foto, Betina Kadner, que durante casi una década, fue la única chica en las cabinas de aviación civil españolas. Tuvo que escuchar burlas de sus propios compañeros quienes, por la radio, le decían: «¡Betina, a la cocina!»

Pero las mujeres no se conforman con la aviación civil, también están presentes en el campo militar. Hace dos décadas que el colectivo femenino forma parte del ejército español, sin embargo, nunca una chica había conseguido ser piloto de caza y ataque hasta el 2007, año en el que Rosa María García-Malea superó la especialidad, convirtiéndose en la primera mujer en pilotar estos aviones de combate.

En la foto Rosa Maróa García-Malea, que optó por ser piloto de caza porque «es a lo máximo que puede aspirar un piloto»

Y, ¿quién dijo que las mujeres no tienen capacidades aeronáuticas?, ¿quién dijo que las mujeres no tienen inquietudes aventureras? Esta claro que, ¡Nosotras también podemos!

Según el SEPLA, el incremento de las mujeres en la aviación civil en la última década ha sido notable. «Hace 30 años la presencia era prácticamente inexistente», asegura el sindicato.

El Ejército del Aire cuenta ya con 300 mujeres, cuando en 2008 se celebró el 20 aniversario de la incorporación de la mujer al Ejército.

Como se aprecia, la lucha por la igualdad llegó a la aeronáutica hace muchos años, más de los que muchos habíamos imaginado.

Mencionar también que muchas mujeres españolas que consiguieron logros aeronáuticos no se encuentran en este post.

Además muchas mujeres de otras nacionalidades participaron en esta lucha.

Si queréis saber más sobre ellas: http://womanpilot.com/,
http://avion.microsiervos.com/aviacion-comercial/mujeres-piloto-espania.html ;